El taburete Henry nació en Aix-en-Provence, en el sur de Francia, en septiembre 2010, de manos del diseñador francés Alexandre Reignier.
Bajo un marcado enfoque escandinavo y con inspiración japonesa, se conjugan en este mueble una interesante mezcla de materiales fríos y cálidos.
Está compuesta por una base de lámina de aluminio, plegada y lacada en blanca, sobre la que se encajan piezas curvas de madera maciza de fresno, conformando el asiento.
La delicadeza de sus líneas y su acabado natural, invitan al contacto y aseguran un asiento cómodo.
Con solo 100 ejemplares disponibles, todos numerados y firmados por el artista, la silla Henry se transforma en un mueble exclusivo y de gran calidad de diseño.